Cuenta una antigua leyenda que un niño que estaba por nacer,
le dijo a Dios:
Me dicen que me vas a enviar mañana a la tierra, pero
¿cómo viviré tan pequeño e indefenso como soy?
Entre muchos ángeles, dijo Dios,
escogí uno para ti que te está esperando.
El te cuidará.
Pero dime, aquí en el cielo no hago más que cantar y sonreír,
y eso basta para ser feliz.
Pues tu ángel te cantará,
te sonreirá todos los días y tu sentirás su amor y serás feliz.
¿Y cómo entenderé cuando la gente me hable,
si no conozco el extraño idioma que hablan los hombres?
Tu ángel te dirá las palabras más bellas y dulces
y más tiernas que puedas escuchar,
y con mucho cariño y paciencia te enseñará a hablar.
¿Y qué haré cuando quiera hablar contigo?
Tu ángel te juntará las manitas
y te enseñará a orar.
He oído que en la tierra hay hombres malos.
¿Quién me defenderá?
Tu ángel te defenderá aun a costa de su propia vida.
Pero estaré siempre triste porque no te veré más, Señor.
Tu ángel te hablará siempre de Mi
y te enseñará el camino para que regreses a mi Presencia,
aunque Yo siempre estaré a tu lado.
...
En ese instante una gran paz reinaba en el cielo,
pero ya se oían voces terrestres,
y el niño presuroso repetía suavemente:
Dios mío, si ya me tengo que ir, por favor,
dime el nombre de mi ángel,
¿cómo se llama?
Su nombre no importa, dijo Dios,
tu sólo le dirás Mamá.
MADRE AMADA, MADRE AMOR
¿Cómo llegué a surgir de tus entrañas?
¿Cómo logré crecer en tu interior?
¿Cómo pude nacer si Dios no estaba
haciéndose presente a través del Amor?
¿Cómo pudo la Vida darme tanto?
¿Cómo logró reunirse en este ser?
¿Cómo pudo gestarse este milagro
sino en el Amor puro que existe sin nacer?
Por eso sólo te amo y te venero,
y no me cuesta nada comprender
que mi amor hacia ti no es un deseo,
ni un escape, ni un miedo, ni un placer;
sino el más natural de los reflejos
del Amor que no tiene parecer.
¿Cómo no amarte entero hasta la muerte?
¿Cómo no amarte tanto aún después?
¡Cómo no adorarte para siempre
si eres realmente el Amor en mi ser!
¡Felíz día de las Madres, Amor del mundo!
Madre amada,
ResponderEliminarángel que la vida me regalas
mi amor hacia ti....tan inmenso
es el placer de mi vida que te ama
y ahora te siento....
En mi cuerpo,
en mi misma Alma,
por dentro y por fuera
toda yo,
desde mis entrañas,
porque reposé en las tuyas
y pude sentír de ti madre
el sabor de tu vida,
y lo mucho que me amas
eres relamente....
mi vida eterna despues de mi muerte.
Una madre a su madre
GRACIAS POR LOS INSTANTES DE AMOR QUE VIVO AQUÍ.
MI PADRE FUÉ MUY IMPORTANTE TAMBIEN EN MI VIDA
Eres todo un poeta Willy casi la copio y las junto cuando pueda y le añado algo no sé pero que afinidad tengo aquí, gracias por hacerme disfrutar.
ResponderEliminarDE QUE PARTE ERES DE ARGENTINA, ES QUE YO AMO MUCHO A CAPILLA DEL MONTE- ERKS-????
UFFF!!! PRONTO EMPEZARÉ UN CRSILLO Y NO PODRÉ NI PASAR A VISITARTE, DURARÁ UN MES :(
Gracias Alma: aquí el día de las madres es ahora, en octubre, entiendo que en otros países, no lo sabía, que tonto.
ResponderEliminarTu poema es realmente hermoso, lo escribiste ahora o lo tenías? Bueno, no importa tanto, sino la poesía en sí, que es amor plasmado!
Hoy justo hace un año que la mía se fue, a ese lugar que el cuerpo no puede llegar, y por eso se lo deja. También la extraño, pero siento que su amor está en mí con cada respiración, con cada acto y emoción.
Una madre es Dios en el la tierra. Amor que da amor sin pedir nada, sólo por ser.
Te felicito Alma, por lo buena madre que eres y por el amor que siempre irradias, tu hijo debe ser también un ser de luz!
No importa, lo del curso o donde vayas. Ahora ya sé que tardas pero siempre llegas, como el amor!
Un abrazo que dureeeeee mucho tiempo!
PASÉ SIN TIEMPO A VERTE, LA POESÍA ME LA ICISTE SENTIR TÚ EN ESE INSTANTE, TENGO MADRE, PERO NO LA VEO TODOS LOS DÍAS, PORQUE VIVO UN POQUITO APARTADA Y A VECES LA AÑORO, PADRE NO TENGO, YA DESENCARNÓ, PERO LO AMO Y LE IRRADIO LUZ CUANTICAMENTE, PORQUE EL AMOR TIENE MIL CAMINOS.
ResponderEliminarTENGO UN HIJO Y UNA HIJA, Y LOS AMO CON LOCURA, SON MI AMOR VIVIENTE, MI VIDA DESDE LA SUYA.
Cuando pueda pegaré tu poesia junto a la mia, ahora no tengo tiempo, pero me haces sentir mucho aquí, gracias.